7/6/15

LA CUNA DE LOS LATIDOS (un pasaje de vida)






Es de madrugada, estoy volviendo a mi casa
El barrio está en silencio…..pero puedo oír
El eco de unos ladridos, que llegan con el viento

Los árboles, dividiendo con sus ramas las luces
Visten las sombras con sus reflejos y en ellas
Puedo ver los duendes, jugando con las hojas

Las veredas, con sus huellas de pasos perdidos
Acunan en sus baldosas, la soledad de la noche,
Y al oír un ronroneo de gatos, veo en los tejados
Un galanteo de amor

Llego y al entrar un oasis de ilusiones me recibe
Como la alegría de un muelle…. que inadvertido
Por la gente, recibe en el secreto de sus grises
El arribo feliz de sus navegantes

La habitación donde navegan mis sentimientos
Me espera como una barca en un puerto de silencio
Miro a través de la ventana y puedo ver en el jardín
Que las glicinas, los jazmines y las rosas

Van calmando la sed de amor…con las gotas
De besos, que el cielo, les derrama con su rocío
Con la misma ansiedad…que veo las orillas del mar
Cuando esperan la pasión de sus corceles blancos

Al bajar las persianas, en mis ojos se refleja…
Un espejo de nostalgias y en mi corazón,
Un recuerdo, ilumina en mi mente la presencia
De mis padres, cuando hablaban de sus sueños

Me acuesto y desde una biblioteca, sobresalen
Las fotos de mis hijos, regalándome esa inocencia
Con que llenaron de felicidad y amor mi corazón

Apago la luz y los pensamientos van y vienen
Como un viento que se arremolina en un torbellino
Que sube y baja por las distintas etapas de mi vida

El silencio compañero del momento, me invita
A recorrer las distancias hacia mi pasado
Y en un instante, siento que con el alma,
Voy por un laberinto de sombras hasta llegar….

A un pasaje, enmarcado de mi vida
En ese lugar, empiezo a recordar
Una parte de mi historia, llena de ilusiones,
Alegrías, tristezas, triunfos, derrotas,
Dolor, felicidad, amor y Esperanzas

Encontrando los errores y los aciertos que he tenido
Y sin poder remediar esas faltas que he cometido
Arrepentido, emprendo mi regreso, entre oraciones

Pidiendo perdón y al agradecer las gracias recibidas
Puedo oír la voz de Dios, concediéndome su bendición
Para que vuelva a ese cuerpo, que aun dormido, espera
Que la luz de la esperanza, ilumine la cuna de sus latidos
Eduardo Nieto. Mújica