Una colonia de aves marinas
Hoy esperaba mi paso…
Por las playas desiertas
El día era gris…
El sol tímidamente, se asomaba,
Pero allí,… estaban ellas
Aguardándome,
con sus alas inquietas
con sus alas inquietas
reflejando las luces del cielo
Como un regalo de vida
Como un regalo de vida
De repente y ante la llegada
De nuevos corceles blancos…
Alzaron vuelo….
Con la precisión de su magia
Iban a cosechar....
Lo que el mar les concedía
Como fruto de la esperanza
Conmovido…retome mi camino
El sol ya acariciaba la arena
Y al ver los collares de cristal
Que las olas dejaban…
Sentí que la presencia
de Dios
Enaltecía la Fe de mi
alma
Y con esa gracia que el señor
Me otorgaba, aprendí…,
“” Que el Amor la Fe y la Esperanza “”
Es la fuerza que èl les dio
A nuestras almas para que
Con el corazón enfrentemos
Los imponderables de la vida
Eduardo Nieto Mujica