Soñé como mis latidos se conmovían...
Al acunar en su interior los pensamientos
Porque llevaban un paisaje donde su piel
Era la flor que aromatizaba en una colina
Llegue hasta ella como peregrino sediento
Calmando en su oasis el amor con sus besos
Y borracho de pasión vi salir en el amanecer
La luz de un rubí que iluminaba mi cielo
Por eso esta noche al cerrar mis ojos
Emprenderé con mis sueños el regreso
Por ese camino con la esperanza y la fe
De encontrar el rubi de mi colina
Eduardo Nieto Mújica