Rescate de tus ojos...
La magia soñada por el corazón
Cuando mi boca, con danzas de besos
Despertaron en tus labios la innegable pasión
El amor encendió las sonrisas
Y aparto del espíritu, perplejas sombras
Porque el eco de los latidos eran melodías
Que reflejaban la luz de nuestras almas
La lluvia vestía la tarde...
El abrigo de la ternura,en flor se convirtió
Y almacenando las gotas regadas por el cielo
La esperanza con la fe… en nosotros floreció
Eduardo Nieto Mújica