Eran las diez de esa noche
Cuando exuberante y bella
Me abriste tu corazòn
Con la magia de tu alma
Una túnica de velo negro
Sobre tu blanco y suave cuerpo
Irradiaban el oasis…
Donde la pasión se refugiaba
Acaricie la suavidad de tu pelo
Y al ver el amor reflejado en tus ojos
Esa noche…te entregue mi corazón
Al sentir el sabor de tus besos
Eduardo Nieto Mújica