En la soledad de una playa desierta
Me recosté, mirando el inmenso mar
Y pensando en ti….
Embarque mis pensamientos
En la barca de mi alma
Y navegando con mis ojos
Amarre mi ilusión en el horizonte
Esperando que la magia
Del cielo, con sus cálidas brisas
Hipnotizara la ansiedad de mi osadía
Con las luces y el reflejo de tu imagen
Exuberante y bella…apareciste
Frente a mí, como
una estrella
Donde la fascinación de melodías
Embargaba mi ser con su hechizo
Tus ojos, profundos como el mar
Reflejaban, el secreto del amor
Y tus labios…. como un oasis
Mostraban el
puerto de mi real destino
Mas cuando el rocío de la noche
Despertó mi corazón dormido
Asombrado, mire el
mar….
Y pude oír el saludo de sus olas
Eduardo Nieto Mújica