Sin que tú lo sepas
Cuantas veces he salido
A buscarte por los mares
De mis pensamientos
Cuantas veces….
Busque el puerto de tu templo
Para impregnar mi espíritu
Con el canto de tus latidos
Y cuantas veces, obsesionado
Respire las brisas, de corceles
Blancos, pensando que en ellos
Venían tus cálidos suspiros
Cuantas veces... mi voz
Se embarcó en el silencio
Llevando a través de los tiempos
La ansiedad de entregarte mis besos
Y cuantas veces me dormí
Pronunciando tú nombre
Para sentir el calor de tu amor
En la magia de los sueños
Más aunque, nunca
lo sepas
Mis sentimientos irán hacia ti
Con la esperanza y la fe que lleva
El corazón de un peregrino
Eduardo Nieto Mújica