Cuando entre mis copas vacías…
Veo en una de ellas, la presencia
De la luz de un pasado…
Atrapado en la
soledad del silencio
Mi alma abre los umbrales del tiempo
Y en los secretos que
guarda mi espíritu
Percibo los sonidos…
Burbujeantes de un
champagne
Y en el horizonte de mi
pasado, sus ojos
Y su bella sonrisa,
vuelven a brillar
Recordando en mi
corazón, ese amor
Que dejo su magia en
la resonancia de un cristal
Oh amor…! Aunque nuestras vidas han seguido
Por otros caminos, siempre entre todas ellas
Solo yo podre saber, cual es la que en su cristalino
Como un tesoro oculto, está la pasión de nuestros besos
Eduardo Nieto Mújica