EL SILBATO DEL TREN....
El silbato de un tren en la distancia
Estremeció mis
sentidos…
Y en un momento…
me vi en un andén
Abordando un vagón
con las ilusiones a flor de piel
En mis oídos,
volvía aquel instante
Donde el canto que liberaban
los rieles
Al paso de sus
ruedas, iban transportando
Mis pensamientos por un
mundo de ilusiones
Los paisajes que
pasaban raudamente
Atrás iban quedando
como un adiós
Que despidiéndome del
pasado….
Acentuaba aún más la
ansiedad de mi llegada
En un momento me
vi reflejado
En el vidrio que tenía el marco de mi ventana
Y como en un espejo vi con los ojos del alma
La imagen de la mujer que todavía amaba
Sus ojos llenos de
brillo, seguían siendo
Esa luz, de
esperanza que junto a la
sonrisa
De sus labios rojos era
el umbral….
Donde sus besos de magia me habían seducido
El aroma de su perfume, aun podía sentirlo
Como un rocío que invadía las raíces de mi espíritu
Y atrapado en ese
horizonte de pensamientos
Cuando me preguntaba: ¡...Habrá sabido cuanto la ame...!
Una voz que cada vez
más, intensa me repetía
¡SEÑOR…SEÑOR! …, el café y el diario que me pidió
Desconcertado lo mire y volviendo a la realidad
Le di las gracias, pero aun mi alma pensando
En ella, seguía aferrada en el silbato de ese tren
Mientras revolvía con mi cuchara la taza de mi café
Eduardo Nieto Mujica