LA MAGIA DEL AMOR
Pescando estaba en un muelle,
Una tarde… de un cálido verano
El mar estaba sereno y el atardecer
Ya partía hacia los portales de la noche
Y en ese silencio que cubría
Su inmenso y majestuoso reino
Mirando el horizonte…mi corazón
Confeso sus sentimientos
Y con los ojos del alma
Vi que su imagen aparecia
Como un espejo que reflejaba
El amor que yo sentía
De pronto como una respuesta
Se despertaron los corceles blancos
Y raudamente empezaron a cabalgar
Llevando los latidos del mar
en la melodía de su canto
Para derramarlos sobre las arenas
Con besos secretos en collares de cristal
Y ante esa magia que mis ojos veían
Respire con mis brazos abiertos
Las brisas que la vida me ofrecia
Porque en ellas venia la fuerza
Del amor, la fe y la esperanza
Eduardo Nieto Mujica