Esta tarde… la soledad
Recorrió los senderos de mi mente
Y en sus laberintos pudo
encontrar
Sentimientos que refugiados dormían
Mi corazón, pendiente de su osadía
Le abrió los umbrales
de mi espíritu
Para que ella pudiera ver que la barca
Del amor, amarrada estaba
en mi alma
Y entre brisas de suspiros que mi cuerpo
Propagaba, como corceles blancos del mar
Se marchó de mi lado, porque comprendió
Que hasta en mi
silencio, las melodías
De
la vida se oían
Eduardo Nieto Mujica
“Solo podrá entrar la soledad en tu alma
Si dejas que el amor naufrague en tu corazón”
Eduardo Nieto Mujica