UN DIA COMO TANTOS ....

UN DIA COMO TANTOS….

Hoy  al regresar a mi casa en el apogeo de la noche, 
un eco de ladridos llega a mis oídos, 
cruzando  los umbrales del silencio.

El alumbrado de la calle, 
se pierde entre las ramas de los ârboles 
que al moverse por el viento, 
dibujan fantasmas  jugando sobre las veredas, 
mientras un gato por los  tejados  
ronroneando se va alejando en busca de amor.

Al entrar,  la  melodía de una radio, 
que deje encendida, me da la bienvenida,   
voy a mi habitación y observo 
el mismo orden en que la deje, 

bajo las persianas que dan al parque
y al mirar el patio con sus baldosas rojas,
veo como las flores  impregnadas
con las suaves caricias del rocío, 
van alimentando  la esencia de su fragancia

Me acuesto y veo unos libros 
que esperando ser leídos, aceptan mi cansancio,
al lado  un cuadro  me refleja el amor eterno, 
de mis padres.

Apago el velador  y los pensamientos van y vienen,
como un viento, que se arremolina en un torbellino
que sube y baja por las distintas etapas de mis horas vividas 

El silencio compañero del momento 
va creando un  clima  para recorrer  distancias.

Y en un instante mi alma elevándose de mi cuerpo 
parte  en una barca de ilusiones,   
con rosas, besos y esperanzas, para navegar   
por el mar de los sueños.

Y llegar esa playa, donde la luna  y las estrellas 
acunadas en sus arenas, cuidaran  
el amor de nuestras almas

Eduardo Nieto Mújica

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